Los astros y el matrimonio ( 40)

 

 

 

   Del matrimonio

 Los significadores generales del matrimonio, que es algo común para ambos sexos, son la Casa 7 y el ángulo oeste (el ascendente) . Invariablemente observaremos que cuando Saturno, Marte o Urano estàn alli, se producirá discordancia en el matrimonio. Si están afligidos, es decir en Signos no apropiados o con malos aspectos, se producirà una uniòn fatal e infeliz, que terminarà en miseria u odio, o desagrado mutuo; si son asistidos por un aspecto afortunado de Jùpite o de Venus, el matrimonio, aunque no sea próspero, puede ser feliz; pero el nativo vivirà mas que su cónyuge. Así como se causa la infelicidad en el matrimonio, así también la felicidad en él serà el resultado de que Jùpiter o Venus no estèn afligidos en la Casa 7.


 

     Los significadores particulares del matrimonio son diferentes; de este modo la Luna es el significador particular del matrimonio para el hombre, en cuanto al contrato de matrimonio se refiere; y para casarse con suerte, la Luna debe estar (en el horóscopo del hombre) asistida por los buenos Aspectos de Jùpiter o Venus. Para ser feliz en el matrimonio puede ser suficiente que la Luna estè en Trìgono con el Sol, pero eso no asegurarà la buena fortuna de forma duradera.

 La Luna en Conjunciòn, Paralela o con malos Aspectos con Saturno, Marte o Urano haràn que la persona sea desafortunada en la elección de su pareja.

Con la Luna con malos Aspectos con Jùpiter, el Sol o Venus, de ninguna manera serà afortunado o afortunada.



Con la Luna en Conjunciòn, Paralela o buenos Aspectos con Jùpiter o con Venus tendremos las mejores condiciones para iniciar un romance afortunado, siempre que la Casa 7 no esté afligida por la presencia de estrellas malignas. El planeta ya situado en la Casa 7, o bien a quièn la Luna se aplique (es decir, que se acerque) por Aspecto, describirà la persona de la esposa, y sus condiciones personales.

En un horóscopo femenino, el Sol es el significador principal, y debe ser juzgado en todos los aspectos como la Luna en el horóscopo masculino. En ambos sexos, Venus afligido, muestra tradicionàlmente infelicidad;  en las natividades femeninas, Marte tiene una gran participación en eso, y muchas mujeres tienen matrimonios tardíos únicamente por tener a Marte débil y afligido en su horóscopo.

En una natividad femenina, si  la Luna se encuentra en un Aspecto maligno con Marte la infidelidad es muy probable, a menos que Jupiter o Venus ayuden a evitar esa tendencia. Pluralidad de esposos o esposas se indican por los  significadores que están en signos bicorpóreos o porque la Luna tenga muchas configuraciones con otros astros.

En cuanto a los hombres, observen la Luna y Venus. Si la Luna se encuentra entre el horizonte y el meridiano oriental, o en el cuadrante opuesto, los hace  casarse temprano en la vida, o después de haber pasado su mejor momento, con parejas más jóvenes que ellos o ellas  mismas. Si está en los otros cuadrantes de la figura, se casarán tarde en la vida, o con mujeres mayores que ellos mismos. Si se configura con Saturno, se retrasa el matrimonio; y si esta a unos pocos grados del Sol, o en mal aspecto al Sol, lo mismo; si estos dos testimonios concurren, siendo la Luna al mismo tiempo occidental, nunca se casaran. Si la Luna es oriental, y especialmente si es angular, y en aspecto a muchos planetas, siendo ellos fuertes, y ella esté situada en Geminis, Sagitario o Piscis, puede que se casen más de una vez. 

Si la Luna se aplica a Saturno por aspecto, la esposa sera malhumorada y seria; si a Jupiter, tendra buena conducta y sera ahorrativa; si a Marte, atrevida y rebelde; si a Venus, alegre y guapa; y si a Mercurio, una mujer inteligente y sensata. Si Venus está relacionado con Jupiter, Saturno o Mercurio, las esposas será previsora y unida a sus familias. Si ella está conectada con Marte, el será violento y de mala conducta, especialmente si es por mal aspecto. Si la Luna esta en buen aspecto al Sol, y el Sol no está afligido, o si Venus es fuerte, el nativo se casa con una persona de respetables conexiones Si se encuentran buenos planetas en la Casa 7, el individuo (ya sea hombre o mujer) es feliz en el matrimonio; y si hay planetas malignos allí, al reves.

Herschel (Urano) en la Casa 7 es maligno; y si aflige a la Luna en el nacimiento de un hombre, o al Sol en el de una mujer, destruye la felicidad domestica. La descripción de la esposa será muy parecida a la del planeta al que la Luna forma el aspecto más cercano, considerado con el signo en el que se encuentra. Pero también se puede considerar el signo en la Casa 7. nadie, se dice, se deberia casar con una persona nacida bajo el mismo signo que él.

Para el matrimonio de las mujeres hay que considerar el Sol, Venus y Marte. Si el Sol es oriental, se casan temprano, o con hombres más jóvenes que ellas mismas; si el Sol es occidental, ellas se casan tarde o con hombres mayores. Si el Sol es angular, y en aspecto a muchos planetas, especialmente en Geminis, Sagitario o Piscis, ellas se casan más de una vez. Saturno aspectando al Sol (si el Sol se le aplica)  da maridos firmes, pero malhumorados; Júpiter da caracteres honorables y nobles; Marte violentos, hombres temerarios e insensibles; Venus esposos amables y hermosos; y Mercurio da un carácter astuto, inteligentes y previsores. Si Venus está con Saturno, o en aspecto con él, el esposo será aburrido y laborioso; si con Jupiter, curiousto y honesto; si con Marte hombres imprudentes y adúlteros; si con Mercurio, listo,  pero aficionado al cambio. Si el Sol o la Luna se aplican a Urano, la esposa o el esposo serán excéntricos. Si el Sol no tiene aspecto con Marte, y Marte es débil en la figura, la nativa femenina no actuara bien en el matrimonio; y si el Sol está en mal aspecto con Saturno al mismo tiempo, es probable que viva soltera. La Casa 7 muestra en parte la descripción del marido.

Se descubrió que el planeta Mercurio influenciaba a los hombres nacido bajo su dominio, es decir, cuando era potente en el nacimiento, lleva a una vida sedentaria y contemplativa o estudiosa. Y, como tales hombres se dieron necesariamente a buscar el retiro y habitar solos, o lejos de "los lugares frecuentados por los hombres", ese planeta fue nombrado en consecuencia, del hebreo "bud", que significa "solo",  "solitario", de donde encontramos que el nombre indio de Mercurio era Buda. Los griegos tradujeron aparentemente esta palabra, porque le llamaban Hermes, del término que significaba el que vive en soledad --- Eremetes; de donde tenemos la palabra "ermitaño".

 

 

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