El Elíseo: el cielo de los paganos

Campos Eliseos

Los paganos tenían en el inframundo tanto los lugares mas paradisiacos como los menos afortunados. El Elíseo estaba muy cerca aunque separado de las regiones dominadas por Hades.

Crono gobierna ese lugar garantizando la felicidad de sus habitantes, allí el día es permanente, con mucha luz y con una buena temperatura, ni frío ni  calor excesivo. Los afortunados que lograban llegar allí en premio a su virtud durante su vida en la Tierra, podían renacer cada vez que lo deseaban en el mundo de los vivos, su estancia era un continuo de fiestas, juegos y música. 

 

La entrada a ese lugar "infernal", pues a todo el inframundo se le denomina infierno, se encuentra muy cerca de la laguna o estanque del "Recuerdo", allí el celoso Hades no tiene ningún dominio. 

 

A pesar de ser el Elíseo un lugar tan feliz, todavía lo es mas la Isla de los Bienaventurados, localizada muy próxima al Elíseo,  para llegar a residir allí es necesario haber renacido desde el Elíseo al mundo terrenal al menos tres veces, y haber merecido, por una vida virtuosa,  cada vez,  el destino feliz en ese lugar del inframundo. 

Hubo algunos escritores que erróneamente situaron la isla de los Bienaventurados en el mar Negro, frente a la desembocadura del río Danuvio y dicen que allí esta Aquiles y Elena disfrutando su eterno descanso, aunque esto solo es una leyenda.